SAN CARLOS DE BARILOCHE (AB).- El festival nacional de cine Río Negro Proyecta que se realizó en esta ciudad durante los últimos dos años no tendrá versión 2012, según confirmó ayer el secretario provincial de Cultura, Carlos Magliarelli.
El funcionario adujo que las razones para levantar el festival y también el concurso "A rodar Río Negro" son "estrictamente económicas".
Dijo que la gestión anterior dejó abultadas deudas por premios y contrataciones impagas. "Se nos haría muy duro pagar este año dos festivales juntos", argumentó Magliarelli.
El proyecto quedó trunco a pesar de los reclamos surgidos del "cluster audiovisual" de esta ciudad y también de la cineasta Susana Nieri, quien fue la responsable del "Río Negro proyecta" desde su origen y expresó su disgusto mediante una carta abierta.
Nieri dijo que no tiene filiación política y que su trabajo fue técnico y artístico. Pidió que los funcionarios actuales "sepan considerar lo construido hasta aquí", con la idea de "profundizarlo". Cuando todavía era una posibilidad, opinó que discontinuar el festival y el concurso sería "un paso atrás en la historia de la provincia en relación al cine y a las artes audiovisuales".
El Río Negro Proyecta tuvo una primera edición en Roca en el 2009 y desde el 2010 se realizó en Bariloche, donde consiguió fuerte repercusión y se ganó un espacio en el calendario nacional. Incluía un certamen competitivo de largometrajes nacionales, otro de filmes regionales y un tercer concurso de películas en construcción.
Los premios concedidos el año pasado (por un monto total de 90.000 pesos) nunca fueron pagados por el Estado provincial. También existen incumplimientos varios por otros gastos de organización que llevan la deuda a unos 500.000 pesos. El secretario de Cultura provincial era en aquel momento Armando Gentili.
Según Magliarelli, están a punto de completar el circuito administrativo para "sacar los pagos", pero advirtió que no todo el dinero dependía del presupuesto provincial, sino que hubo también aportes del Instituto Nacional de Artes Audiovisuales y del Consejo Federal de Inversiones "que tenían ese destino pero se aplicaron para otra cosa".
Según el funcionario, su intención es "trabajar en un nuevo proyecto audiovisual para la provincia, con un festival bienal y de alcance latinoamericano". Dijo que sería una propuesta "más interesante, quizá con más inserción y la idea es arrancar con la primera edición el año que viene".
El cluster audiovisual integra a unos quince productores y realizadores de esta ciudad. Hace unos tres meses –a la vista de lo que se venía– sus miembros comunicaron por nota a la secretaría de Cultura su interés en que Bariloche no pierda el festival de cine y se propusieron a "trabajar en lo que hiciera falta".
Uno de ellos, Miguel Ángel Rossi, dijo que el "Río Negro proyecta" fue un acontecimiento que permitió "posicionar a Bariloche a nivel nacional", con una fecha fija en septiembre que ya tenía una cierta tradición, en una ciudad caracterizada históricamente por su escasa oferta cultural.
Dijo que este año recibieron gran cantidad de llamados para conocer detalles del festival 2012 y no pudieron dar respuesta.
Rossi aseguró que pidieron al Concejo Deliberante que se interese en el tema y se aprestan a enviar una nota al gobernador Alberto Weretilneck a fin de que "se entere de que hay un grupo de gente dispuesto a laburar para que el festival se sostenga".
Susana Nieri dijo que al comienzo de la actual gestión le comunicaron que la política audiovisual anterior "era una de las cosas buenas a las que iban a dar continuidad" y le pidieron que arme un documento y un presupuesto para continuar con el proyecto, pero luego de las vacaciones todo se diluyó. "Nunca más me llamaron", aseguró.
Nieri fue desde 2009 la cara visible del festival (que arrancó en su primera edición con 2.000 espectadores y en la última convocó a más de 8.000) y no ocultó su desazón ante la interrupción del trabajo.
A su juicio, lo ocurrido es "una papelón y una vergüenza para la provincia". Aclaró que el festival es rionegrino, aunque haya quedado con sede fija en Bariloche, y aclaró que el municipio local "nunca colaboró en nada" y el interés del empresariado "fue casi inexistente".
Dijo que durante su gestión "hubo una política clara para poner al cine en su lugar, dar trabajo y crear un polo de producción de contenidos audiovisuales", mientras que ahora "no hay nada de nada".
